Friday, June 27, 2014

Dina

Al principio confieso que tuve mucho temor, ya que no sabía que tenía que decir o el consejo que tenía que decir a mujeres con 10 o 20 años más que yo, pero hoy puedo decir que mi disposición y la gracia de Dios he aprendido, estos meses he apreciado historias de alegría, sufrimiento, rechazo, dolor y mucha culpabilidad.

Nunca voy a olvidar a una de mis clientas, en su primera cita me dijo “yo no te diré nada de mi vida porque nadie la va entender”… yo le respondí, no te preocupes; pero en su segunda cita llego dispuesta a decir parte de su vida:

Entre lagrimas dijo que fue abusada sexualmente toda su niñez y que muchas veces le dijo a su mama lo que pasaba pero su mama nunca le creyó, pasaron los años y ella creció llena de enojo contra su mama y a la edad de 17 años empezó a trabajar como prostituta, quedo embarazada de una niña que nace con problemas en las rodillas, en una operación su hija tiene complicaciones y muere a los 10 años, esta situación hizo que ella se sintiera culpable por la perdida, pasaron los años y vuelve a quedar a tener un embarazo no deseado, los primeros meses intento abortar a su bebe pero no funciono, entonces decidió darlo en adopción cuando naciera porque no lo quería… Cuando llego al Nido solamente fue por la ayuda y en su cita me dijo que nunca había hablado con su bebe porque no sabía que le diría; yo le dije que repitiera

“Mi bebe solo quiero que vengas sanito” ella no podía creerlo, lloraba y lloraba por que lo había logrado, desde ese día ella empezó a amar a su bebe, hoy todavía lucha con su pasado, pero cree que Cristo es su fortaleza y bueno su bebe tiene 2 meses y es el amor de su vida. 

Estas historias me enseñaron a escuchar la voz de Dios, amar muchísimo a estas mujeres sin importar su status, origen, creencias y con una vida muy diferente a la mía, estas mujeres me ayudaron a madurar en mi vida, decisiones y tener una mejor relación con Dios.

Posdata: Momentos como cuidar bebes que lloran y lloran y no sabes que hacer, otros como salir corriendo para el hospital por que un bebe esta por nacer, son inolvidables…

Le agradezco a Dios y a Gloria Hoover por haber confiado en mí y continuemos orando por El Centro Prenatal “El Nido” que está cambiando muchas vidas.


Escrito por Dina. Gracias Dina por todo lo que ha dado a El Nido. 

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